Hablar de cine expandido no es solo referirse a una proyección que se sale o deconstruye la pantalla rectangular. Es también hablar de una postura política respecto de la producción y reproducción del cine. Es expandido en su sentido más amplio.
Conversé con Morris Trujillo, cineasta, académico y performer mexicano, en el marco de la primera edición de la escuela de cine experimental Transfrontera (que se desarrolló en Arica durante el invierno del 2016) para indagar un poco en esta propuesta artística, cinematográfica y también política.
Morris Trujillo: Se piensa que el cine como algo político es hablar sobre política, tomar una temática social y si no tienes una temática social no es cine político. Hacer cine político también es saber en qué punto estás parado en la dinámica de la sociedad.
Naomi Orellana: Y cómo resuelves la producción de tus cosas…
M.T: Cómo resuelves la producción de tus cosas. Esa decisión puede llegar a ser completamente libre. Si nos ponemos filosóficos la libertad no existe, pero en el sentido de la creación tú tienes la decisión. Es darte cuenta de donde estás parado, de qué lado estás y a quien apoyas; si estás también generando un cine de reapropiación, comunitario, que genere tejido social. Generando o promoviendo creadores y un cine que analice las formas de hacer el cine. El cine expandido no es agarrar el proyector y moverlo para el lado de la pantalla. Sí lo es, pero eso implica una reflexión alrededor de muchísimas cosas.
N.O: Hablemos del cine de reapropiación, ese aspecto del cine expandido.
M.T: Desde que doy clases tiendo a dar muchos ejemplos históricos. El cine expandido y el cine experimental están muy impregnados de movimientos artísticos que surgieron después de la primera guerra mundial. A fines de la primera guerra mundial hubo movimientos artísticos que eran la contraparte de las grandes películas de Hollywood, de las grandes películas de mucho presupuesto. Se generó una serie de películas artísticas que trabajaron con el formato fílmico de una manera artística, de un arte plástico. Duchamp, Manray…
N.O: Las vanguardias…
M.T: Las vanguardias. Y eso se diluye, pasa, y en el cine se retoma después de la Segunda Guerra Mundial, donde nacen grupos sobre todo marxistas, artístico marxista, como el situacionismo, el letrismo, movimientos previos a lo que después sería el arte contemporáneo. Aunque estamos hablando de cine, retomo ejemplos del arte, no necesariamente ejemplos que tienen que ver solo con el cine. Eso es lo que lucho siempre con los cineastas, todos sus ejemplos están dentro del cine, siempre tiendo a dar ejemplos que vienen de otras artes, el cine no es la única referencia, eso es un reduccionismo. El arte contemporáneo ha influenciado muchísimo la cinematografía.
El situacionismo comenzó haciendo actos performáticos al estilo de los dadás. Comenzaron a hacer intervención del espacio público, una especie de artistas anarquistas, pre arte contemporáneo. Esto después influenció a muchas expresiones como el performance. Esto impregnó muchísimo al cine experimental y al cine expandido, así nace el cine expandido.
N.O: ¿Y la reapropiación?
M.T: En el situacionismo se habla del espectáculo como una forma de manipulación, son los primeros que hablan del mundo del espectáculo y de los medios masivos de manipulación, como una forma de manipulación, política, ideológica. Uno de los preceptos es utilizar todo lo que nace de los medios masivos de comunicación, reutilizarlo y generar piezas que a su vez los critiquen. Es decir, agarro el resultado de toda tu basura, lo que genera la televisión, lo que genera el cine, lo que genera el internet, lo reutilizo y hago piezas a partir de eso. El collage, el arte pop de los 60’s retoma esto de agarrar elementos populares y crear piezas de arte, esto devino en el cine de reapropiación.
Después de la segunda guerra, lingüistas filósofos y estructuralistas se dedican a estudiar los medios masivos y a observar cómo el marxismo fue muriendo y se convirtió, en lugar de guerra de clases, de ciudadanos burgueses y pobres, de consumidores y mercado. Dejamos de ser, para la filosofía, pobres o ricos. Hacia dónde iba la sociedad y el consumo, se estaba convirtiendo en el punto central de casi cualquier pensamiento crítico. El cine experimental está muy impregnado de esa crítica, de como los medios masivos son una herramienta de este nuevo régimen y como no hay forma de luchar contra ellos. Genera una postura hacia esa situación. Es pensar un poco hacia donde se fue el mundo y decidir de qué lado estás.
Por Naomi Orellana