Foto de Marco Panatonic
Durante los meses de julio y agosto del 2020, nos reunimos a través de la pantalla en torno a la práctica de la escritura, para hacerle un espacio en nuestras vidas al ejercicio de escribir en medio de una pandemia mundial, invierno y profunda incerteza.
Cada sábado, durante dos meses, nos reunimos de 17 a 19:00 o incluso 19:30 horas, para acompañarnos en la decisión de hacerle un espacio en nuestra casa y en nuestras vidas al hábito de escribir. Al rededor de 12 personas, cada sábado durante dos meses, hicimos una pausa para no hacer otra cosa que escribir, leernos y acompañarnos.
A partir de una breve guía, exploramos tópicos generales de la escritura para ejercitar ciertas estructuras poético-formales y recorrer algunos caminos más o menos conocidos, aunque siempre considerando e incluso deseando el extravío.
Los textos que encontrarán a continuación, son el resultado de estos dos meses de trabajo en los que mientras dábamos paseos, más o menos peligrosos por la escritura, resistíamos al invierno y a una estricta cuarentena. Ninguno de estos textos se trata de eso.
Naomi Orellana. Facilitadora del taller.
Por Francisca Cabezas
Por Marco Panatonic
Por Esperanza Fuentes
Por Paulina Contreras
Por Diego Agurto Beroiza
Por Marcial Parraguez
Por Claudia Araya
Por Nicole Galdames Aguirre