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Escritura

Triada de lo cotidiano

by adm1n_IyP septiembre 3, 2021

Por Lien Ale

El calor de su pecho

Corro y me refugio en el calor de las tetas de mi abuela. 

La abrazo fuerte y me quedo en ahí hasta que se calma, el llanto de caerme en el patio o en la calle.

Hasta que pasa el dolor de la ausencia de mi papá a diario, de la ausencia de mi mamá ese fin de semana.

El dolor de ser chiquita y sentirme sola en este mundo 

pero con la certeza de tenerla a ella

su calor, 

su cariño, 

su comida. 

Me refugio en ese calor en todas y cada una de mis penas, 

y en cada alegría la estoy abrazando. 

Me refugio en el calor de las tetas de mi abuela 

y dejo de sentir el dolor de su ausencia.  

Me sueño a mi misma envuelta su calor, en su abrazo, 

y vuelvo a sentirme niña en el lugar más seguro del mundo.

El calor de su pecho

viejito y sabio, 

de tanto amor

Macoña, luna y estrella

Nos acostumbramos 

al sonido del silencio

el estero que corre cerca

el viento en los árboles

y las aves que los habitan 

a veces rompemos el silencio

que no es silencio, con música

y bailamos, a veces corres,

tus patas suenan rompiendo

las hojas y  las ramas

entonces un ruido extraño

un sonido que no es de 

nuestro silencio 

y paras tus orejas y corres 

saltas las rocas y observas 

que no sea nada 

entonces vuelves me miras

todo está bien, no lo dices,

pero lo siento.

Lo cotidiano

Desde que no estás en mi vida me he vuelto pésima en hacer el desayuno. 

Se me quema el pan, 

se me olvida que dejé la cafetera prendida 

y cuando siento olor a café está vacía. 

Preparar el desayuno no tiene sentido. 

Si no eres tú quien espera durmiendo que llegue con café recién hecho y huevos con queso a la cama.

Preparar el desayuno no tiene sentido. 

No tiene sentido si no está implícito en el pacto 

dónde tu me llevas desayuno cuando duermo en tu casa 

y yo te llevo desayuno cuando duermes en mi cama.

Desde que no estas, el único desayuno que me queda bien, 

es el de la gata, 20 gramos de pellet en su plato, 

aún así queda con hambre.

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